C.A. Osasuna 3 – Sevilla F.C. 2
36º Jornada de Liga
11 de Mayo de 2.011
Tuvimos lo que merecimos. No luchamos por el partido, y Osasuna sí. Sabían que sus opciones de salvación pasaban por los partidos de casa, ante su gente, en su ambiente, ese que ahoga cualquier aliento al contrario hasta dejarlo en un vaho sin alma. Eso fue lo que hicieron con nosotros, y les salió bien.
De nuevo fue un partido de entrenador, de los que hay que leer bien en el vestuario y en el banquillo. El Sevilla adolece también de eso. No tiene ese modelo de entrenador que insufla casta en partidos como el de ayer. La alineación inicial ya era una prueba de ello. Les concedimos el centro del campo para intentar llegar en contragolpes. Fazio simplemente no estuvo en el partido, lo que equivalía a jugar con diez, bueno peor, porque con diez multiplicas tus esfuerzos, pero Fazio si estaba sobre el campo, pero no tuvo nunca un sitio, porque no supo buscarlo o porque se empeñaba en buscarlo donde había un compañero. No teníamos una referencia para subir la pelota, y abusábamos del balón en largo, a esperar que Kanoute o Negredo las cazaran a 30 metros del área, o que los extremos, Perotti y Acosta, tuvieran que recorrer 40 ó 50 metros conduciendo el balón y con la defensa contraria encima.
Con todo, Negredo fue más listo que ninguno y en 2 minutos, los que van del 25 al 27, puso al Sevilla 0-2. Dos llegadas al área, dos goles. El vallecano volvió a demostrar que clase de jugador es. Lleva 4 goles en dos partidos, y 23 en toda la temporada.
Entre Negredo y Javi Varas, hicieron que nos marcháramos al descanso con esa renta de dos goles, y con Osasuna empujando porque veía que se podía hacer más.
Y efectivamente, en el primer minuto de la segunda parte, Osasuna comienza la remontada con un gol que se repetiría en el tercero, internada de Camuñas por la izquierda, pase al centro del área y gol.
La segunda parte fue un monólogo pamplonica, el Sevilla no tuvo la pelota, no supo parar el partido y se conformaba con resistir las acometidas de Osasuna. De nuevo faltó el entrenador, para que recompusiera las líneas y ordenara a un equipo que corría detrás del balón. Pero los cambios fueron hombre por hombre y obligados por lesión, el caso de Fazio, al que sustituyo Zokora, que salió sin calentar y lo notó, y Sergio Sánchez, al que sustituyo Dragutinovic, que se estrenaba esta temporada con 10 minutos. El único cambio que pudo hacer realmente, fue el de Capel, que entro por un Acosta voluntarioso, pero que nota mucho que le falta ritmo de competición.
Fueron 45 minutos de ahogo sevillista, que bien pudo matar el partido con 1-2 en una ocasión bien conducida por Perotti, que centro al área y Kanoute dejaba en franquía a Negredo, pero su tiro seco se marchó desviado. Fue la última del Sevilla, que veía como en tres minutos, 86 y 89, Osasuna obtenía la recompensa a su esfuerzo y se llevaba el partido. Mención aparte a una defensa que concede demasiado para esta competición.
Para nuestra alegría, la jornada ha sido benévola con nuestro equipo, y ninguno de los rivales en la lucha por un puesto en Europa la próxima temporada, ha conseguido los tres puntos. Seguimos dependiendo de nosotros mismos, y eso siempre es importante. Si el sábado hablábamos de la grada del Ramón Sánchez Pizjuán, de su importancia, hoy lo volvemos a hacer de la grada del Reyno de Navarra, sin ellos, Osasuna no levanta el partido de ayer. Pues a nosotros nos queda un partido en casa, ante una Real Sociedad que viene casi salvada, sin presión, y nosotros jugándonos las opciones europeas, podemos que nuevamente vuelvan a perder todos, pero ¿y si ganamos nosotros? ¿No sería eso mucho mejor?. Para ese partido están fuera, Cáceres, Navarro, Fazio, Alexis, Sergio Sánchez, Navas, Rakitic todos lesionados y Zokora y Medel sancionados. Con eso, el once del Sevilla estará lleno de nombres sin continuidad, con el peligro que eso tiene. Además mucho me temo que la grada no se conformará con cualquier planteamiento, y se aprovechará que el Pisuerga pasa por Valladolid para rendir cuentas de lo ocurrido durante la temporada.
Sólo nos hace falta una victoria, y esperar que el Español no gane en Zaragoza, o un empate, si el Español pierde, sólo eso, para asegurarnos la plaza europea, luego si es la 7º en vez de la 5º serán los jugadores los que se queden sin vacaciones, aunque en verdad sólo los que acudan a la Copa América, por que el resto las tendrán desde el 22 de Mayo.
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